Decomisó la Profepa en Chiapas tres mil 902 acumuladores usados de automóviles y motocicletas; hay dos detenidos

•Los vehículos no estaban autorizados para transportar residuos peligrosos

Con el apoyo de elementos de la Procuraduría General de la República (PGR), inspectores de la Delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) en Chiapas, decomisaron casi cuatro mil acumuladores usados para autos y motocicletas, procedentes de un país centroamericano, y que eran trasladados a una ciudad ubicada en el centro de México, donde les extraerían el plomo a fin de reutilizarlo y/o exportarlo a otra nación.

Los conductores de los dos vehículos en que se realizaba el transporte de estos recursos considerados como peligrosos, así como las propias unidades automotoras y las baterías eléctricas, quedaron a disposición del Agente del Ministerio Público de la Federación en Tuxtla Gutiérrez, Chis., por haber incurrido presuntamente en delitos contra la gestión ambiental.

Al informar lo anterior, el Delegado de la institución en Chiapas, Lic. Aurelio Cruz Ovando, comentó que se procedió al aseguramiento de vehículos y acumuladores porque los choferes no exhibieron la autorización que emite la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) para trasladar materiales peligrosos, como lo son los acumuladores por el plomo que contienen.

Por lo mismo, los transportes no eran los adecuados, ya que no cumplían con las medidas y condiciones de seguridad y prevención que impone la SEMARNAT, con la finalidad de evitar una eventual emergencia ambiental.

El primer vehículo fue detectado en un puesto de revisión ubicado en el kilómetro 187 de la carretera Ocozocoautla-Las Choapas; se trata de un tracto camión, marca Kenworth con placas del Servicio Público Federal, el cual trasportaba en la caja un total de tres mil 807 acumuladores usados de automóviles.

Posteriormente, en la colonia Plan de Ayala de la capital chiapaneca, se detuvo el segundo vehículo, el cual contenía en su góndola 95 baterías de carros y motocicletas, también sin ninguna medida de seguridad.

Como se sabe, el estado de Chiapas ha sido identificado como parte de la ruta de ingreso de acumuladores usados de carros provenientes de Centroamérica, y que son llevados a empresas de reciclaje y disposición final que están asentadas en ciudades del centro del país, donde les extraen el plomo para reutilizarlo o exportarlo a países que lo usan en sus procesos industriales.